En estas épocas navideñas tengo un gran dilema; poco tiempo y muchas tradiciones que cumplir. Una de las que los niños nunca se quieren perder es la de hacer nuestras propias galletas de navidad. ¡Pero no creas que las hacemos muy sofisticadas! Nuestras galletas son de las más simples pero muy divertidas de hacer.
¿Estrés navideño? Ezo que eeeees? Montar el árbol, decoraciones y luces, buscar el Tió, esperar al Nikolaus (una tradición nórdica – alemana, holandesa…- del día 6 de diciembre que se podría considerar el antepasado de lo que actualmente conocemos como Papa Noel) intentar organizar todo lo necesario antes de que los niños empiecen con las vacaciones, mercados de navidad… ¡Y las Galletas de Navidad!
No me mal interpretes, todo esto me encanta. Y me encanta la navidad. Sus villancicos, los regalos, los detalles con los demás, la lotería, las recogidas de dinero para buenas causas y las recogidas de juguetes (estas dos últimas se hacen más a menudo, pero parece que por navidades todo el mundo se vuelve más generoso).
El problema en todo esto está en que el tiempo es limitado. Al menos a mí me da la sensación. Sí que la Navidad aquí dura hasta el día 6 de enero, pero no sé porqué para mí una vez pasado el 25 de diciembre los villancicos ya no me suenan igual y el árbol brilla de forma distinta. Quizás sean mis orígenes alemanes que no tienen en cuenta a los Reyes Magos – ahí todos los regalos los trae el Christkind – y por eso pierdo el entusiasmo. Por eso tengo «prisa» para hacer todo lo posible antes del 25 empezando más tarde del 1 o 2 de diciembre. ¿Suena raro?
Volviendo al tema; este fin de semana tenía planes. Muchos planes. Había que recoger materiales para el pesebre, escribir las postales navideñas – con 3 semanas de retraso para llegar a tiempo a Alemania-, preparar los detalles para los profesores y hacer galletas de navidad. Empezamos por las galletas.
Empezó muy mal
Sinceramente? Ese día tenía un humor de perros. El peque no durmió durante la noche y tampoco me dejó dormir a mí. Mi suerte fue que ya les había contado a los niños el día anterior que haríamos galletas y me obligaron a hacerlas por insistencia, si no me hubiera pasado el día tirada en el sofá como si hubiera pasado la noche de juerga.
Vamos! que gracias a los peques me animé, recogimos toda la casa y nos pusimos a hacer galletas EN PIJAMAS a las 5 de la tarde. Toma nota por favor, que todo esto pasó mientras yo seguía de mal humor y los niños con energías sin gastar. Empezamos… Mal! Rompieron un huevo antes de que pudiera decir «¡empecemos!». En esos momentos está muy bien tener a la pareja cerca o ser una persona practicante de la meditación con una calma de piedra. En mi caso me salvó lo primero.
Cambio de rumbo
Tras 3 intentos de inicio fallidos en los que los mandé a su habitación a jugar para rehacer los humores (tiempo que dedicaron a construir un tren de legos superchuli – véase video adjunto) nos calmamos todos y yo me relajé un poco. Después de eso dejé en manos de Paparetro los niños y las galletas y dirigí un poco desde detrás del móvil (grabando) los pasos a seguir.
A partir de ahí todo fue bien. Los niños se lo pasaron bien y papá kaos y yo también. Cada uno tenía su trabajo y sus cosas que atender. Y la cocina empezó a oler a Navidad, galletas y a hogar acogedor (el olor a azúcar, harina y mantequilla en el horno para mí no tiene otra definición).
En el video se vé que no quedaron perfectas. No fueron galletas dignas para hacer un vídeo de Youtube – seguramente todos los videos de youtube tendrán galletas con mejores pintas que las nuestras – pero cumplieron la función de hacer algo en familia, me calmaron el mal humor, tuvieron a los niños entretenidos, orgullosos de haber hecho sus propias galletas y además estaban riquísimas (puedo confirmar que las apariencias no importan cuando el contenido es el correcto).
Y fueron nuestra cena. Si! fui mala madre, pero después de 2 horas haciendo galletas no tenía ganas de cocinar y los niños tenían demasiadas ganas de comerse sus creaciones.
Sobre la receta: hicimos el doble de masa habitual. Además partimos la masa en 3 para hacer 3 tipos distintos de galletas. Todo fueron modificaciones propias y esas fueron un poco a mano alzada (nos dejamos llevar por intuición en cuanto a cantidades).
Sin más miramientos: Aquí va el vídeo!
Ingredientes
- 250gr de harina
- 125gr de azúcar
- 150gr de mantequilla
- 2 sobres de azúcar de vainilla (como no tenia suficiente añadimos aroma)
- 1 huevo
- canela o cacao para variaciones
- para decorar: 1 huevo, decoraciones, azúcar glas con agua… tu mism@
Procedimientos
- mezclar la harina con el azúcar, la vainilla, la mantequilla y el huevo. Lo mejor es cortarlo todo junto con el cuchillo y amasar luego a mano.
- Una vez amasado puedes dividir la masa y añadir cacao o canela como lo hicimos nosotros.
- Envolver en papel film y dejar reposar en la nevera entre 30 minutos y una hora.
- Sacar una parte de la masa, hacer con el rodillo una superficie de 3mm y recortar las galletas.
- Pintar con huevo y hornear a 180 Cº durante unos 10/15 minutos.
- Dejar enfriar y si queréis pintar con una mezcla de azúcar glas y agua.
- Listas!
No es una súper receta navideña, lo siento, es la receta más sencilla del mundo y que en casa llevamos haciendo desde que tengo uso de razón. Pero no quería compartirla por lo especial que es, sino para demostrar que aunque las cosas no empezaran bien, aunque la receta no sea nada del otro mundo y aunque las galletas salieran físicamente horribles, lo más valioso fue que hicimos algo juntos, creamos recuerdos y convertimos un día de esos que se pasan, te dan pena y que van más mal que bien en un día no perdido, cumpliendo su propósito y sin arrepentimiento.
Salud!
Hola! Soy Jenny
Soy madre de 4 niños, un perro y un periquito.
Me encanta aprender sobre finanzas, minimalismo, organización y un estilo de vida tranquilo y clásico. Intento llevar una vida similar a la de antes, donde todo era lento y el amor por la vida estaba en los detalles.
¿Quieres saber cómo ha sido llegar hasta aquí? Lee más sobre mí historia.
¿Quieres contactar conmigo?Siempre puedes hacerlo mandando un mail a hola@mamaretro.com