Nueces de jabón – limpieza 100% natural

Las nueces de jabón son una alternativa natural a los productos de limpieza que se utilizan hoy en día. Más que nada porque los productos químicos de hoy, en su mayoría son «tóxicos» – tanto para el medio ambiente como para nuestro cuerpo. Son efectivos, huelen de maravilla, pero vienen con unos contras que en los últimos años, en mi caso, han ganado más peso que todos los puntos a favor.

Como madre cada vez me interesa más saber qué llevan mis alimentos, de dónde vienen, qué llevan mis productos de higiene, qué efectos secundarios tienen y… Cómo puedo ser más respetuosa con mi entorno y el medio ambiente para que no vivamos en un vertedero global. No te voy a engañar, no estoy al 100% en todo, pero sí, miro de contribuir en todo lo que puedo.

Por este motivo me interesé por cómo reducir la colada y cómo organizarme en ellas. Además de métodos que fueran respetuosos con la piel (por la piel atópica de la mayor), útiles para los pañales de tela, ecológicas y económicas.

Una de las opciones que encontré fueron las nueces de lavado. Un remedio natural utilizado en la india por cientos de años.

¿Qué son las nueces de jabón?

Las nueces de lavado son el fruto del árbol Sapindus Mukorossi también conocido como «árbol de jabón». La cáscara de estos frutos contiene saponina; un tipo de jabón.

Cuando esta saponina entra en contacto con el agua caliente crea una sustancia jabonosa que se puede utilizar como agente limpiador. Penetra las fibras de la ropa y con el agua se lleva la suciedad. No genera espuma. Pero la espuma no es precisamente el indicador de que se está limpiando, eso es un engaño de márketing.

Son una forma muy suave de lavar por lo que, parece ser que son ideales para personas con piel atópica, eczema, psoriasis o cualquier otra sensibilidad en la piel. También son ideales para lavar pañales y compresas de tela ya que no reducen el efecto absorbente de estos.

¿Cómo utilizar las nueces de jabón?

Las nueces de jabón se pueden utilizar de varias formas:

Directamente en la lavadora

Las utilizo directamente en la lavadora siempre y cuando lave la ropa en caliente. Según lo que he encontrado, unos 45Cº/50Cº.

Para ello pongo de 4 a 8 nueces de lavado en el saquito que viene adjunto (como el de la foto). La cantidad de nueces me viene en el envase; dependerá de si el agua es dura o blanda y si la ropa está muy sucia o no.  Esta bolsita la introduzco directamente en la lavadora. Una vez finalizado el ciclo puedo iniciar uno nuevo reutilizándolas directamente o, si ya estoy de lavar, dejarlas secar fuera de la lavadora.

Para liberar la saponina se requiere, como he dicho, de agua caliente. Si utilizo un ciclo de lavado frío, dejo las nueces en remojo en agua caliente durante unos 5 o 10 minutos antes de lavar la ropa. Eso libera la saponina y me hará el mismo efecto.

Reutilizo las nueces hasta que quedan de un color grisáceo y una textura muy blandita. Suele ser alrededor de unos 10 lavados, dependiendo de la temperatura y calidad del agua.  También las he utilizado 2 o 3 veces y luego dejado secar para aprovecharlas y hacer…

Jabón líquido de nueces de jabón

Al estar acostumbrada a utilizar detergente normal, eso de no tener un olor en la ropa me molestaba un poco. Por ese motivo me gustó más la versión de utilizar las nueces para hacer detergente líquido y poder, así, añadir unas gotas de aceites esenciales.

Encontrarás infinidad de recetas por internet. Es cosa de ir probando o esperar a que te publique la mía 😉

El jabón líquido es libre de conservantes y dejará de ser útil a las 2 semanas aproximadamente. Para aguantarlo un poco más lo guardo en la nevera o lo congelo en forma de cubitos y pongo unas 2 unidades en cada lavadora.

Lo que debes saber antes de comprar

Puntos positivos

• Las nueces de lavado son una forma de lavar bastante económica. En amazon 1kg me salió alrededor de unos 11 euros. Con eso da para hacer unas cuantas lavadoras – más o menos la colada de un año.
• ¡Son multiusos! No solo sirven para el lavado de la ropa. También se pueden utilizar en la higiene (he probado el champú pero no me acabó de gustar) y en la limpieza del hogar (para limpiar el suelo, los cristales o lavar los platos por ejemplo)
• Las nueces en la lavadora no tienen gran complicación.
• No generan residuos. ¡Son aptas para el compostaje!
• Son aptas para lavar pañales de tela ya que no llevan perfumes ni suavizantes que eviten la absorción.

Puntos negativos

• Aunque puedo añadir unas gotas de aceite esencial al jabón líquido o vinagre perfumado como suavizante de ropa, no tiene ese olor tan intenso que dejan los detergentes químicos a los que tanto estaba acostumbrada. Las nueces de jabón no desprenden olor alguno y lo único que se huele es un poquito el aceite esencial. Pero eso pasa a ser un punto positivo a la larga porque ahora los detergentes habituales los encuentro demasiado intensivos de olor y me marean.
• La ropa queda limpia, pero algunos blancos pueden coger un color grisáceo a lo largo del tiempo. (siempre se puede añadir un poquito de percarbonato para evitarlo)
• Aunque las nueces de lavado limpien y laven bien, el efecto espuma queda ausente. Al principio cuesta acostumbrarse.
• Siempre hay que buscar la bolsita de nueces dentro de la colada, sobretodo si luego se pone la ropa en la secadora.

Aunque tengan sus puntos negativos que desaniman un poco, me resultan ser un método bastante efectivo, cómodo y sobretodo natural. Yo las uso alternadas con un jabón casero a base de pastillas de jabón natural y me siento muy bien con las dos opciones, y mi bolsillo también.